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Arquitectos: Fent Estudi Coop V
- Área: 177 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Milena Villalba
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Proveedores: Baxi, Adobe Systems Incorporated, AutoDesk, Carpintería Muycarp, Derribos Andrés, Ferroli Europa, Fontini, Grupo MCI - One Light, VIVES CERAMICA, Viciano & Rivera
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Entender la arquitectura y la ciudad como soporte de vida, como escenario que genera y posibilita relaciones y formas de vida diversas, es el principio que guía las intervenciones que realizamos desde Fent Estudi.
Nuestra manera de abordar la rehabilitación responde a una aproximación respetuosa, un análisis basado en la escucha y una intervención que pone en valor lo existente. Durante este proceso los y las habitantes son las protagonistas y todo el esfuerzo proyectual va destinado a construir una casa única para una forma de vida única.
Un proceso de decisión constante sobre aquello que permanece y aquello prescindible, modificable o inevitablemente insalvable. Un proceso también de desnudez progresiva, de descubrimiento y encuentro con estructuras, recorridos, visuales, luces, corrientes, olores, sonidos, reflejos, objetos… con todo aquello que da identidad y significado al lugar. El reto al cual nos enfrentamos es poner en valor una construcción vernácula, anónima, donde su sinceridad es constructiva y su autenticidad se deposita en sus rincones, cerámicas, huellas, sombras y sedimentos, exhibiendo la memoria de una casa recorrida, sentida, respirada, vivida… La intervención no tendrá que ser protagonista, sino capaz de resaltar la espacialidad y materialidad preexistentes adaptándolas a las nuevas exigencias de habitabilidad.
“Ca La Maña” se ubica en el centro histórico de Torrent, un pueblo del área metropolitana de València. Se trata de una vivienda unifamiliar construida en el año 1920, entre medianeras, catalogada como Bien de Relevancia Local por su tipología de casa tradicional valenciana (vivienda-patio-animales). La vivienda se organiza con el espacio de “paso del carro” en una posición central, a modo de distribuidor, dejando dos habitaciones a ambos lados en la primera crujía que da a la calle y reservando la segunda crujía para el salón-comedor y escalera. El espacio para animales, llamado “andana”, se situaba al fondo de la casa, separado por un patio. En la planta superior de la vivienda, cubierta por un tejado a dos aguas con estructura de madera, aparecía la “cambra” donde se almacenaban las cosechas.
Este esquema original había sido modificado a lo largo de los años con la adhesión de ciertos volúmenes impropios para albergar los núcleos húmedos (cocina y baño), reduciendo en gran medida la superficie de patio. Ello, además de generar ciertas patologías constructivas, había reducido en gran medida la luminosidad interior y la posibilidad de ventilación natural de la vivienda.
El proyecto contempla una actuación que respeta la tipomorfologia del inmueble, su envolvente y propone la eliminación de los elementos impropios existentes en el patio. Para ello, se proyecta la cocina como elemento independiente compositiva y formalmente para distinguirla de la edificación original, resolviendo la relación estructura tipología/funcionalidad desde una visión más contemporánea. La totalidad de la intervención pretende respetar al máximo la tipomorfologia y los rasgos característicos de la casa tradicional valenciana, adaptándola a las necesidades y el modo de vida actual de sus habitantes actuales.
